Biografía de D. Benito Juárez

Benito Juárez (1806-1872)

Nació en San Pablo Guelatao, Oaxaca, en 1806. De extracción indígena, habló solamente zapoteco durante gran parte de su niñez. En la ciudad de Oaxaca vivió con su hermana Josefa, quien servía en la casa de don Antonio Maza. Estudió en el Seminario de Santa Cruz, único plantel de secundaria que existía en Oaxaca.
Posteriormente, Juárez estudió Derecho en el Instituto de Ciencias y Artes. Fue regidor del Ayuntamiento de Oaxaca y diputado local. Durante algún tiempo vivió de su profesión defendiendo comunidades indígenas. Al ser derrocado de la presidencia el general Paredes Arrillaga, Juárez resultó electo diputado federal, y le correspondió aprobar el préstamo que Gómez Farías había solicitado a la Iglesia para financiar la guerra contra Estados Unidos de América.

Fue gobernador de su estado natal, donde procuró el equilibrio económico y ejecutó obras públicas importantes: caminos, reconstrucción del Palacio de Gobierno, fundación de escuelas Normales; levantamiento de una carta geográfica y del plano de la ciudad de Oaxaca; reorganizó la Guardia Nacional y dejó excedentes en el tesoro.

Al volver Santa Anna al poder, muchos liberales, entre ellos Juárez, fueron desterrados. Juárez fue a Nueva Orleans, donde, sin descuidar su actividad política, desempeñó diversos oficios para ganarse la vida. Mientras tanto en México se proclamó el Plan de Ayutla que desconocía al presidente.

Al caer Santa Anna y llegar Juan Álvarez a la presidencia, nombró a Juárez Ministro de Justicia e Instrucción Pública.
Desde este ministerio, expidió La Ley sobre Administración de Justicia y Orgánica de los Tribunales de la Nación, del Distrito y Territorios (Ley Juárez), con la que fueron abolidos los fueros, privilegios que tenían los militares y el clero por encima de otras personas. Nombrado gobernador de Oaxaca, convocó a elecciones; como resultado de ellas, fue reelecto.

Promulgó en su estado la Constitución de 1857. Se le nombró ministro de Gobernación y posteriormente fue elegido presidente de la Suprema Corte de Justicia, durante el gobierno del presidente Comonfort.

Al desconocer Comonfort la Constitución de 1857, y dar un golpe de Estado, encarceló a diversos ciudadanos, entre ellos a Juárez. Este acto desencadenó la Guerra de Reforma.

Al ser liberado asumió la presidencia en Guanajuato por ministerio de ley. Con apoyo del grupo liberal, expidió las Leyes de Reforma.

Al concluir la Guerra de Reforma con el triunfo de los liberales, fue electo constitucionalmente para continuar en la Presidencia Debido a la intervención francesa, en mayo de 1863 tuvo que dejar la ciudad de México, ejerciendo su gobierno desde diferentes puntos del país. Regresó a la ciudad de México el 15 de julio de 1867, después de que Maximiliano fue juzgado y fusilado en el Cerro de las Campanas.

Por su defensa de las libertades humanas, defensa que sirvió de ejemplo a otros países latinoamericanos, fue proclamado "Benemérito de las Américas".

Al triunfo de la República, dijo en un célebre discurso: "Mexicanos: encaminemos ahora todos nuestros esfuerzos a obtener y a consolidar los beneficios de la paz. Bajo sus auspicios, será eficaz la protección de las leyes y de las autoridades para los derechos de todos los habitantes de la República. Que el pueblo y el gobierno respeten los derechos de todos. "Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz".

LOS ZAPOTECAS

LOS ZAPOTECAS


Uno de los aspectos sobresalientes de la personalidad de Benito Juárez fue el de haber sorteado un sinnúmero de situaciones adversas debido a su origen indígena; él era zapoteca, de lo que siempre se sintió orgulloso.

En el estado de Oaxaca los zapotecas son el grupo más numeroso. Se les ubica en cuatro las áreas geográfico-culturales: El Istmo de Tehuantepec, el Valle, la Sierra Norte de Oaxaca y el Sur de la Sierra Madre Oriental.

Aunque no existe certeza plena sobre el origen del pueblo zapoteca, se sabe que éste es milenario. Se cree que inicialmente los zapotecas se desprendieron de un núcleo paleo-olmeca. Aquel pequeño grupo se internó en el actual territorio oaxaqueño por el Soconusco; prosiguieron hacia el Istmo de Tehuantepec y a la región de Cempoaltépetl donde vencieron a los huaves y a los mixes; continuaron su camino por el actual Teotitlán del Valle (junto al Valle de Tlacolula), finalmente se asentaron en el Cerro del Tigre, también denominado Monte Albán.

Existe un sitio arqueológico llamado Gheo Shih que se supone zapoteca y que data del año 4,000 a. C.
Es hasta el año 1450 cuando se evidencia plenamente, una identidad cultural zapoteca, y se erigieron sus primeros centros y estados regionales. Hacia el siglo VIII finaliza la hegemonía zapoteca y queda abandonado Monte Albán.

Entonces fundaron un nuevo centro político: Zaachila.

Tiempo después, con la fusión de zapotecas y mixtecas surgió una nueva cultura que tuvo su sede en Mitla.
Otros aspectos que distinguieron a la cultura zapoteca fueron: el haber incursionado en las matemáticas donde efectuaron cálculos aritméticos empleando, como los mayas, un sistema vigesimal .Conocieron el uso del cero. En la ingeniería y arquitectura erigieron plazas y construcciones monumentales; entre ellos observatorios lo que les permitió estudiar el firmamento y hacer avances en la astronomía. También desarrollaron un calendario.

En la agricultura implementaron técnicas de cultivo altamente efectivas. En la medicina desarrollaron avanzados conocimientos de anatomía, fisiología y patología lo que les permitió realizar operaciones quirúrgicas, dentales y ortopédicas; y en la orfebrería trabajaron espléndidamente el oro y la plata en magníficas piezas ornamentales.

El desarrollo cultural de la Mesoamérica del año 1,150 a.C. es especialmente significativo, ya que aparecen las primeras formas de escritura. Se sabe que Monte Albán llegó a ser para los escribanos el centro intelectual de mayor relevancia. Con la conquista la escritura zapoteca cayó en desuso a la par que comenzaba el ocaso de aquel centro y continuó paulatinamente hasta que la escritura alfabética europea desplazó por completo a la escritura jeroglífica zapoteca. Este hecho no impidió que los indígenas de aquel tiempo continuaran, de manera furtiva, con el registro de sus tradiciones.
Monte Albán logró en sus tiempos de máximo esplendor un estatus cultural similar al alcanzado por la Gran Tenochtitlan.